Como me gusta el hojaldre,hice estas rosquillas el año pasado y sin querer las encontré y que dulce recuerdo me trajo,son deliciosas,y muy fáciles de hacer,animaros.
ROSQUILLAS DE ALCALÁ
Ingrediente:
-3 laminas de hojaldre
-1 huevo
-150 gr azúcar para el almíbar
-80 ml agua para el almíbar
-5 yemas para la glasa de yemas
-1 huevo para la glasa de yemas
-2 claras para la glasa real
-zumo de un limón para la glasa real
-250 gr azúcar glasé para la glasa real
Así es como lo vamos a hacer:
- Se pincela con huevo batido la superficie de una lámina de hojaldre y superpone otra. Se vuelve a pincelar y se superponen una tercera lámina de hojaldre.
- Se pasa suavemente el rodillo por toda la superficie, presionando un poco para que las láminas de hojaldre queden unidas, cuidando de que no queden aplastadas. Con ayuda de un corta pasta o descorazonador de manzanas se cortan discos, y se les hace un agujero en el centro para que tengan la forma de rosquillla.
- Se ponen en una bandeja de horno forrada con papel de hornear, Se colocan ligeramente separadas, ya que en el horno van a crecer un poco. Se hornean a 180º durante unos 20 minutos, o hasta que se vean doradas. Luego se dejan enfriar sobre una rejilla y se reservan,
- Mientras tanto se prepara el glaseado de yemas. Se calienta el agua con el azúcar y se hace un almíbar a punto de hebra. Para conseguir el punto perfecto es bueno contar con un termómetro. El punto de hebra se alcanza al llegar a los 118º. Si no tienes termómetro, sacas la pala de mover el almíbar , mojas la yema del dedo índice y lo unes con el pulgar, y al separarlos se debe formar una hebra de almíbar.
- Una vez hecho el almíbar, se deja enfriar un poco. Se baten ligeramente las yemas y el huevo y se añade el almíbar poco a poco, dejando caer un hilo, y mezclando bien con las varillas, pero sin batir fuerte, para que no pierda el bonito color amarillo que le aportan las yemas. Finalmente se pasa por un colador.
- Con ayuda de unas pinzas, se van bañando las rosquillas en la glasa de yemas, y se dejan sobre una rejilla para que escurra el exceso de glasa. Se dejan reposar hasta que se sequen,
- Por último se hace la glasa real, mezclando las claras con el zumo de limón y el azúcar glasé, Cuando todo está bien integrado, se glasean las rosquillas bien,mojándolas en la glasa, o cubriéndolas con ayuda de un pincel. Se vuelven a meter en el horno unos 15 minutos a 50º para que se sequen o se dejan reposar en la rejilla hasta que están bien secas.Una locura de pasteles os lo aseguro. Tevasapuntar.
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